Para empezar a escribir algo decente recuperaré este post que empecé y nunca acabé (reciclaje patrocinado por Capcom :P).
Hace casi un par de años Ivrea me sorprendió con este gran manga, uno de los mejores seinen que se publican actualmente. El punto de partida mezcla 2 temas que me fascinan y me preocupan a partes iguales: el fin de los recursos naturales en la Tierra y la exploración espacial. Con una planeta cada vez lleno de más conflictos, la mayoría de ellos provocados por el petróleo y otras fuentes de energía, el descubrimiento de un nuevo recurso en la Luna en suficiente cantidad para proveer a la humanidad durante 1000 años inicia una nueva carrera espacial. EEUU, Europa y Japón inician el Proyecto Nexus para extraer la nueva fuente de energía. Los protas son Goro Saruwatari y Jack F. Woodbridge, conocido como Lostman, 2 amigos que deciden enrolarse en el proyecto Nexus después de haber escalado el Everest y darse cuenta que necesitan llegar más alto, a un sitio sin límites. El primero es un trabajador japonés de la construcción con una resistencia y pericia extraordinarias, un tipo muy mujeriego (versión astronauta de una mujer en cada puerto xD). El segundo es un experimentado militar norteamericano, lo que hace que sus objetivos no se limiten al proyecto Nexus. La historia va transcurriendo a medida que avanza el proyecto, muy lentamente con el paso de los años. Se mezclan trozos de la historia principal con historias de los personajes (que son muchos, además de los protas), sus sentimientos y sus vidas. El autor se ha documentado bien y eso se nota en el realismo de la historia. Y no solo de la historia, los diseños de las naves y cualquier diseño mecánico, destilan un hiperrealismo increíble y quizás uno de los puntos más fuertes de este manga. La forma de enfocar la historia es también interesante, tanto la trama principal que a veces parece que hable de noticias actuales, como las pequeñas historias de los personajes y los problemas que presenta el proyecto, muchas veces con un transfondo muy humanista.
Algo muy comentado son las escenas de sexo que de vez en cuando aparecen cuando menos te los esperas. Hay 2 opciones: o bien el autor es un autor calentorro random o bien sabe muy bien que el sexo es una manera de atraer público. Probablemente las 2 cosas, pero pesa más la segunda, visto que se van reduciendo tomo a tomo.
En definitiva un manga muy recomendable con una historia que engancha mucho, buen dibujo y muy alejado de la mayoría de cosas que se publican, sin niños/as hipervitaminados y ritalinizados o shojos pastelosos clónicos del montón.